La accesibilidad digital es un tema crucial en nuestra era digital, especialmente teniendo en cuenta la cantidad de personas que dependen de la tecnología para llevar a cabo tareas cotidianas. La accesibilidad digital se refiere a la creación de tecnología y contenido en línea que pueda ser utilizado por cualquier persona, independientemente de su capacidad o discapacidad. En esta nota del blog, exploraremos los diferentes tipos de accesibilidad digital y su importancia en la creación de experiencias digitales inclusivas.
¿Qué tipos de accesibilidad debo considerar?
Para contextualizar un poco la realidad latinoamericana, en Chile los datos correspondientes al Segundo Estudio Nacional de la Discapacidad en 2017 cifró en 2,87 millones de personas con discapacidad. Esto equivale al 16,7% de la población que, por falta de actualización de datos, se asume que persiste al día de hoy. En el caso de Colombia, en diciembre de 2019 se tenía registro de 1.298.738 personas con discapacidades según el registro oficial del Ministerio de Salud y Protección Social.
Al revisar las distintas aristas disponibles en la accesibilidad digital, existen tres pilares que tu equipo de trabajo puede tomar como referencia.
a. Accesibilidad cognitiva
Esta dimensión tiene como objetivo facilitar la comprensión del mundo para que todas las personas puedan entender textos, tecnologías o procesos sin inconvenientes. La idea es crear un proyecto digital que sea predecible, y ayude a estas a evitar y corregir errores.
Algunos de los potenciales perfiles de personas usuarias en esta categoría son:
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Personas con discapacidades cognitivas, como parálisis cerebral o Síndrome de Down.
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Adultos mayores con problemas cognitivos o analfabetos.
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Personas con déficit atencional, depresión u otros espectros cognitivos.
b. Accesibilidad física
La idea detrás de la accesibilidad física es ofrecer alternativas al momento de interactuar con dispositivos o interfaces por medio de herramientas asistivas. Este punto busca eliminar barreras de acceso a aquellas personas con movilidad reducida, afectando su sistema nervioso o muscular.
Algunos de los perfiles de personas usuarias en esta categoría son:
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Personas con enfermedades degenerativas como el Parkinson.
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Personas amputadas de dedos, manos o brazos.
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Personas tetrapléjicas o parapléjicas.
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Personas que se desplazan en sillas de ruedas o emplean bastan como apoyo.
c. Accesibilidad sensorial
La dimensión sensorial está tradicionalmente asociada a la vista y al oído, pero que también incluye a personas cuyas discapacidades cognitivas dificultan el acceso a la información. Es imperativo evitar la creación de barreras sensoriales innecesarias, además de entregar una experiencia que entregue suficiente tiempo y contexto para comprender su contenido.
Algunos de los perfiles de personas usuarias usuario en esta categoría son:
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Personas con discapacidades visuales, como ceguera, cataratas o daltonismo.
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Personas con discapacidades auditivas, como sordera, tinnitus
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Personas con discapacidades sensoriales, como epilepsia.
Como punto aparte, debes considerar que las discapacidades pueden clasificarse como permanentes, temporales o circunstanciales. Una forma de ilustrarlo es ver a una persona ciega, otra persona recuperándose de una operación ocular y alguien que está manejando un vehículo como un potencial usuario con discapacidad visual. Al mismo tiempo, una persona puede presentar múltiples discapacidades.
En conclusión, la accesibilidad digital es un aspecto esencial en la creación de una experiencia en línea inclusiva para todos los usuarios, independientemente de sus habilidades o discapacidades. Al considerar los diferentes tipos de accesibilidad digital, desde la accesibilidad visual hasta la accesibilidad cognitiva, los desarrolladores y diseñadores pueden crear tecnología y contenido que sea fácilmente accesible para todos. Además de ser una responsabilidad ética, la accesibilidad digital también puede tener un impacto positivo en la marca y la imagen de una empresa, así como en su capacidad para alcanzar una audiencia más amplia y diversa. En última instancia, al priorizar la accesibilidad digital, estamos ayudando a construir un mundo digital más inclusivo y equitativo para todos.